CONSTANTES BÁSICAS PARA UNA ESPIRITUALIDAD FUNDAMENTAL
Planteamos a continuación, en una serie de puntos sintéticos (no exhaustivos), cuáles serían, en nuestra opinión, las Constantes Básicas (CB) de una Espiritualidad Fundamental (EF). Es una contribución inicial para una posterior síntesis de todos estos elementos en una serie de principios generales.
Entendemos aquí por ‘Espiritualidad Fundamental’ una ‘Espiritualidad Macroecuménica’, es decir, una Espiritualidad que está a la base de las diferentes religiones empíricas existentes y también del “espíritu religioso” (=“religación con la Realidad”) que no esté codificado (o lo esté de manera muy incipiente) en la institucionalidad “religiosa” histórica.
Es un ‘tipo ideal’ (en la metodología del sociólogo Max Weber), de tal manera que no es necesario que todos estos puntos se encuentren realmente en todas las religiones empíricas, sino que configuran un marco lógico donde las diversas prácticas religiosas encuentran coherencia y consistencia. Sin Espiritualidad no hay religión, sólo un “cascarón vacío”. Espiritualidad es a Religión, como esotérico (interior) a exotérico (exterior). Cfr. la Kábala judía y cristiana, y el Sufismo islámico.
Son, por consiguiente, una serie de ‘constantes básicas’ que se encuentran, explícita o implícitamente, presentes en las diversas religiones. En nuestra opinión serían las siguientes:
1. El fin del ego, la muerte del ego, la superación del ego, del egocentrismo o egotismo (concretado luego en egoísmo). En la historia de la Espiritualidad, esto admite dos formas: (1) la más radical, que es la de la supresión total del ego, por ser una mera ilusión; (2) la de que el ‘pequeño ego’ se integra en el ‘Gran Ego’. En la práctica ambas dan el mismo resultado, que es el de la desaparición del (pequeño o ilusorio) ego (dos maneras de decir lo mismo) en una única Realidad Última.
Por lo tanto, se trata de conseguir una actitud de “non-ego”. Es lo que l@s místic@s clásic@s cristian@s llaman la ‘humildad’ (de ‘humus’, a la altura del ‘humus’, de la tierra). Decía Teresa de Jesús: “La humildad es la verdad”. Pero no se trata de buscar una baja autoestima. Ni, por supuesto, elevada autoestima (“que va como pisando a todo el mundo”). Es la de una personalidad enormemente equilibrada, conocedora de sus enormes potencialidades, pero también de sus limitaciones.
Recordemos aquella vieja historia en la que el discípulo dice al maestro: “Vengo a ofrecerte mis servicios”. Y el maestro contestó: “Si renuncias a tu ‘yo’, el servicio brotará automáticamente”1
Punto de partida para el trabajo interior: ¡somos esclav@s! Observar atentamente nuestras esclavitudes. Cfr. Platón, “Mito de la Caverna” (La República, Libro VII).
2. El desapego o desasimiento (‘Abgeschiedenheit’ en el Meister Eckhart; fundamental en todos los budismos e yogas).
Es el fin de todos los apegos, el desasimiento pleno, el des-aferrarse. Y hay apegos y aversiones: ambos tienen la misma estructura, de tal manera que el apego es “positivo” y la aversión es una especie de “apego negativo”. Los apegos son esclavizadores y acaban con la libertad. Y Espiritualidad es, ante todo, Libertad.
3. El fin del dualismo, la separatividad y la divisividad. Es lo propio de la actitud holística, donde todo está interrelacionado, todo está conectado con todo y nada es independiente o autónomo, sino siempre relativo, relacional o inter-relacional.
Por consiguiente, no a la separación de:
-Dios/Mundo
-Espíritu/materia
-mente/cuerpo
-intelectualidad/afectividad
-cabeza/mano
-masculino/femenino
-religión/política
-“yo”/”l@s demás”, etc.,
sino plena integración de todos los elementos polares en una síntesis holística.
4. Espiritualidad es dejar (al menos dentro del cristianismo) que el Espíritu sea quien actúe.
Que sea Él mismo el protagonista, el “number one”, y no nuestro egocentrismo normal. Es el ‘abandono espiritual’. Ésta es la clave de la Mística. Por lo tanto, se busca más Espíritu y menos institución. Dicho de otra manera, se busca una institucionalidad verdaderamente espiritual, alternativa. No se trata de negar a priori la institucionalidad como tal, sino de ver que la mayor parte de las institucionalidades son rígidas, poco flexibles y verticalistas, y buscar así una institucionalidad alternativa, espiritual.
Es decir, se trata de discernir espiritualmente cualquier realidad humana.
5. Actitud contemplativa vital
“De dentro hacia fuera”. ¿María vs. Marta? (integrando) Contemplación----Acción-----Contemplación (y así sucesivamente). “Wu-wei” taoísta: “no hacer”: seguir el curso de las cosas (sensibilidad holística). Pero ‘contemplación’ no en sentido dualista y relativo, como oposición a ‘acción’, sino contemplación absoluta, como presente en cualquier acción vital. Somos intrínsecamente contemplativ@s.
6. Vivir el Presente, el Aquí y Ahora
Señalado por todos l@s Maestr@s espirituales: Jesús de Nazaret, Buda, Krishnamurti, Eckhart Tolle… Vigilancia. Atención Permanente. Vivir el Aquí y Ahora con toda la intensidad (“hombres y mujeres nuev@s”), dejando el Pasado como Pasado y el Futuro como Inexistente.
7. “Soledad y silencio” (cartujanismo existencial)
Es el lema de una actitud contemplativa en y desde el mundo.
Soledad: Conexión con el Absoluto en lo íntimo del ser.
Silencio: Más allá del ruido físico y el ruido mental (“fiestas del silencio”: Rubén Feldman González).
La Realidad está más allá/más acá del concepto y la imagen. Cfr. el Budismo Zen: “El dedo que apunta a la Luna no es la Luna”. No confundir “el dedo” (las mediaciones) con “la Luna”.
8. La Intuición es lo primero, lo segundo es la Intelectualidad
Intuición trascendental.
La Realidad está más allá/más acá del espacio y del tiempo.
Anti-intelectualismo moderado.
9. En lo cotidiano, siempre en lo cotidiano (¡no escapar!)
Filosóficamente, se trata de descubrir lo trascendente en lo inmanente. La otra dimensión está presente en (inherente a) esta dimensión, en el Aquí y Ahora. El más allá en el más acá. El nirvana en el samsara.
10. Importancia central de la meditación (sin objetivo)
No es sólo (2º.) serenar la mente, aunque también (inicialmente). Observar la mente-emociones: trabajarlo. Nos han dado el “juguete” (mente), pero no nos han explicado las instrucciones de uso. “Quitar los obstáculos”. “Limpiar los cristales para que entre la Luz del Sol” (Juan de la Cruz). Ascética para la Mística o desde la Mística.
Pero sobre todo, (1º.) es “alcanzar” la Intuición (visión) de la Realidad Última (“donde no hay un sujeto que alcanza ni algo alcanzado”). Surge. No hay control sobre ella. “Arrojarse en el Vacío”. La mente significa control, poder. Abandonar la mente, para vivir en el Espíritu, en el Poder del Espíritu. Confianza. Fe.
11. Lograr la “ Sabiduría”, no sólo ni sobre todo ” saberes”
Es una cuestión de actitud de vida. No un conjunto de suma de saberes/técnicas.
12. Originalidad: originariedad (“volver al Origen”)
“Sé siempre tú mismo, pero no seas siempre él mismo” (“rap” social de “Gabriel, o Pensador”, de Brasil).
Práctica de la expresión artística----- ¡creatividad! (¡No hace falta ser genios, sino simplemente desarrollar “lo que ya somos”!).
Invitación a la práctica artística como práctica de “auto-conocimiento” (auto-gnosis).
Autenticidad. Honestidad. Verdad.
13. Ecuanimidad/ataraxía.
Imperturbabilidad, pero con sensibilidad (Che Guevara: “Hay que endurecerse, pero sin perder la ternura jamás”). Ecuanimidad, tanto en el éxito como en el fracaso. ¡No buscar recompensa! La acción vale por su valor intrínseco, no por su recompensa (karma yoga).
14. ¡Práctica! ¡Práctica! ¡Práctica!
Peligros del “romanticismo” (aunque necesario a veces, especialmente al principio) espiritual. “¡No ser pequeño-burgueses/as del espíritu!”. Perseverancia y constancia infinitas. Paciencia absoluta e infinita. Trabajo permanente y constante: la negatividad del trabajo “¡Ser como hormigas!”.
15. Pobreza (exterior/interior)
Austeridad de vida. Ascetismo inteligente. Desapego/desasimiento. Simplicidad de vida. No basta la pobreza exterior, tiene que ser interior. Y viceversa. “Civilización de la pobreza” (Ignacio Ellacuría). Diógenes de Sínope, el cínico: contra-cultura.
16. Actitud total de ‘ahimsa’ (¡no-dañar!)
No-violencia activa. Ser vegetarian@s... ¡No dañar…ni de Pensamiento, ni de Palabra, ni de Obra! No matar nada: vidas, ilusiones, esperanzas! Amor a la Verdad. Ahimsa como expresión de la Verdad (Mahatma Gandhi).
17. Amor por la Naturaleza
Ecología. Naturismo. Observar atentamente, contemplar la Naturaleza, aprender de ella. ¡Nosotr@s somos la Naturaleza! Somos “el resto” de la Naturaleza. “Cántico del Hermano Sol”, de Francesco de Asís. Franciscanismo existencial. Espiritualidades amerindia y afro. Eco-feminismo espiritual.
18. Espíritu de investigación, de estudio, de crítica y de autocrítica
Búsqueda de la Verdad… ¡que ya está ahí!
La autocrítica como precedente obligatorio de la crítica.
19. Androginia
Integrar lo masculino y lo femenino en un@ mism@, así como los valores atribuidos culturalmente a cada uno de los géneros. Cfr. Platón, “Mito del Andrógino” (El banquete).
20. Vivencia del anti-poder (anti-autoritarismo)
Autogestión global. Disolver lo vertical en lo horizontal. Anarquismo espiritual. “Tolerancia” o respeto a la Verdad que hay en cada un@ de nosotr@s.
21. Cosmopolitismo
Universalismo (=crítica de todos los nacionalismos y del “provincianismo”, pero amor por lo local como expresión de lo Universal). “Yo soy el mundo” (J. Krishnamurti). “Todos somos un@”.
22. Sentido liberador y auto-liberador (espiritualidad liberadora)
“Opción por l@s pobres”. Opción por l@s excluid@s. Justicia social. Revolución no-violenta. Sociedad civil autogestionaria.
23. Amor-Compasión
Solidaridad e inter-solidaridad. Frater-sororidad o Soror-fraternidad universales.
24. Resumen-síntesis final: Estar en la Realidad, Ser la Realidad
Responsabilidad por lo Real. Desde la práctica/praxis.
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1 Contado por ANTOHONY DE MELLO, El canto del pájaro, 21ª.ed., Sal Terrae, Santander, 1993, p.136.
rui manuel grácio das neves
managua
01.08.05/08.10.05.